Basural de Luján: un drama que va en camino a la solución
El basural más grande de la Argentina está en Luján. Así de claro y concreto. Así de triste y elocuente. Así de perturbador y preocupante. Así de molesto y vergonzoso.
Un drama de décadas que es la imagen misma de la desidia y la inoperancia.
En el 2019, uno de los principales objetivos del, por aquel entonces candidato a Intendente, Leonardo Boto era la erradicación de este foco de contaminación y enfermedades de 12 hectáreas y que recibe 120 toneladas de basura por día.
Una vez asumido como intendente y con la pandemia por COVID asomando, Boto recibió la visita del Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación Argentina Juan Cabandié para ponerse manos a la obra.
El proyecto comprendió un nuevo Centro Ambiental, y están contemplados en la obra de Ecoparque y Centro Ambiental, que forma parte del Plan Federal de Erradicación de Basurales a Cielo Abierto, cuenta con un presupuesto de 10,7 millones de dólares aportados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y fue adjudicada a la empresa Evasa. El plan incluye la formalización de 220 puestos de trabajo en la planta, que serán adjudicados a quienes hoy cumplen la función en el Basural.
La nueva planta se construirá en terrenos cedidos por la Agencia de Bienes del Estado (ABE) a unos 2,5 kilómetros de distancia del basurero, en la zona denominada Sucre.
Para implementar este ambicioso proyecto primero tuvo que pasar por el Concejo Deliberante, donde fue aprobado casi por mayoría.
Luego por estudios de impacto ambiental y también por una larga jornada abierta a la comunidad con un mecanismo de consulta popular, que encabezó el intendente.
Requisitos previos impuestos por el ente financiador.
El nuevo Centro Ambiental empezó a hacerse realidad hace más de un mes; la erradicación del Basural más grande de la Argentina pasará a ser un mal recuerdo para todos los vecinos de los barrios adyacentes que sufren a diario olores nauseabundos y el humo implacable cuando queman la basura. Factores primordiales para enfermedades de todo tipo.
Tuvo que sufrir el parate de las obras, cuando la dueña de un campo lindero al futuro Ecoparque, presentó un recurso de amparo para frenar la construcción, aludiendo que no se habían cumplido los requisitos previos para el inicio, argumentos que fueron desestimados rápidamente para que que se retome una obra estructural que tiene la aprobación de la comunidad en su mayoría.
¿Los que se opusieron y se siguen oponiendo? Ex funcionarios del gobierno del ex presidente Macri, operadores de la justicia y empresarios inescrupulosos que solo piensan en el interés personal antes que los colectivos.
Una pesadilla que se termina. Un buen sueño que se empieza a hacer realidad.
Comenzó la cuenta regresiva para que uno de los problemas más graves que tiene Luján y la Argentina sean solo un mal recuerdo.
